Imagina esta situación: te decides a instalar la tan esperada actualización Windows 11 versión 24H2, con la promesa de nuevas funcionalidades y mejoras. Tras el reinicio de rigor, la pantalla de inicio aparece, pero hay un problema. Intentas escribir tu contraseña o mover el cursor, y nada. Tu teclado no responde. Tu ratón tampoco. Y al intentar conectar cualquier otro dispositivo USB, descubres que los puertos USB están deshabilitados por completo. La frustración es inmensa. De repente, tu ordenador, esa ventana al mundo, se ha convertido en un pisapapeles inútil.
Esta es una experiencia real que muchos usuarios están viviendo tras la implementación de la versión 24H2 de Windows 11. No estás solo. Este artículo es tu guía completa para entender qué está pasando y, lo más importante, qué hacer para recuperar tus periféricos y el control de tu equipo.
🤔 ¿Qué ha pasado con la actualización 24H2?
La versión 24H2 de Windows 11 es una de las mayores actualizaciones para el sistema operativo, originalmente diseñada para potenciar los nuevos equipos Copilot+ PC. Sin embargo, su despliegue ha sido, como mínimo, turbulento. Algunos usuarios han reportado problemas de rendimiento, pantallas azules (BSOD) e, incluso, la imposibilidad de arrancar el sistema. Pero uno de los inconvenientes más críticos y paralizantes es la deshabilitación de dispositivos de entrada como teclados y ratones, así como la funcionalidad general de los puertos USB.
La raíz de este problema parece residir en una combinación de factores:
- Controladores (Drivers) incompatibles: La nueva arquitectura o los cambios en el kernel de Windows 11 24H2 podrían entrar en conflicto con versiones anteriores o específicas de los controladores de tu placa base, especialmente los del chipset y los controladores USB.
- Gestión de energía o suspensión: Algunos informes sugieren que la forma en que la nueva versión maneja la energía o los estados de suspensión puede afectar la inicialización de los puertos USB al arrancar.
- Archivos de sistema corruptos: Durante el proceso de actualización, es posible que algunos archivos críticos se corrompan, afectando directamente la operatividad de los dispositivos.
- Firmware desactualizado: En algunos casos, el BIOS/UEFI de tu equipo podría necesitar una actualización para ser totalmente compatible con la nueva versión del sistema operativo.
Este percance no solo es molesto, sino que impide cualquier interacción con el sistema, dejándote en una situación de total impotencia. ¡Pero no desesperes! Hay caminos para solucionarlo. 🛠️
❌ Mis periféricos no funcionan: Primeros auxilios antes del pánico
Antes de sumergirnos en soluciones más técnicas, es fundamental descartar lo más básico. A veces, la solución es más simple de lo que parece.
- Reinicia el equipo: Un reinicio completo (apagar y encender, no solo reiniciar) a veces puede resolver fallos temporales.
- Prueba en diferentes puertos USB: Si tienes varios puertos, intenta conectar tu teclado y ratón en otros. Los puertos USB 2.0 (negros) a veces funcionan cuando los USB 3.0/3.1 (azules/rojos/verdes) fallan, o viceversa.
- Prueba con otros dispositivos: Si tienes un teclado o ratón de repuesto, intenta conectarlos. Esto te ayudará a determinar si el problema es del periférico o del sistema operativo.
- Desconecta otros dispositivos USB: A veces, un conflicto o un dispositivo defectuoso puede bloquear los demás. Desconecta todo excepto lo esencial (teclado y ratón).
Si estas acciones sencillas no arrojan luz sobre el asunto, es hora de pasar a soluciones más profundas. La clave aquí es acceder al sistema, incluso si parece imposible.
💡 Soluciones Avanzadas para Recuperar el Control
1. Acceso al Modo Seguro: Tu mejor aliado
El Modo Seguro inicia Windows con un conjunto mínimo de controladores y servicios, lo que lo convierte en un entorno ideal para solucionar problemas. Acceder a él sin un teclado funcional puede ser complicado, pero no imposible.
- Mediante interrupciones forzadas: Enciende tu PC y, tan pronto como veas el logotipo de Windows, mantén presionado el botón de encendido hasta que se apague. Repite este proceso 2 o 3 veces. La próxima vez que arranques, Windows debería iniciar la pantalla de „Reparación automática”.
- Con un teclado PS/2 (si disponible): Si tu placa base tiene un puerto PS/2 (el redondo, verde para ratón, morado para teclado), un teclado antiguo PS/2 puede ser tu salvación. Conéctalo y úsalo para navegar hasta el Modo Seguro.
- Desde otro PC (acceso remoto, si configurado): Si tenías configurado el acceso remoto a tu PC antes de la actualización, podrías intentar acceder desde otro ordenador para solucionar los problemas.
Una vez en la pantalla de „Reparación automática”, selecciona „Opciones avanzadas” > „Solucionar problemas” > „Opciones avanzadas” > „Configuración de inicio” > „Reiniciar”. Después del reinicio, elige la opción para „Habilitar Modo Seguro con funciones de red” o „Habilitar Modo Seguro”.
Dentro del Modo Seguro, puedes intentar lo siguiente:
- Desinstalar y Reinstalar Controladores USB/Teclado:
- Haz clic derecho en el botón de Inicio y selecciona „Administrador de dispositivos”.
- Expande „Controladores de bus serie universal” y „Teclados”.
- Haz clic derecho en cada elemento (especialmente los marcados con un triángulo amarillo de advertencia) y selecciona „Desinstalar dispositivo”. Si te pregunta, no marques la casilla para eliminar el software del controlador.
- Reinicia el ordenador. Windows debería reinstalar los controladores genéricos.
- Actualizar Controladores de Chipset y USB del Fabricante:
Esta es una de las soluciones más efectivas. Necesitarás acceso a internet (si estás en Modo Seguro con funciones de red, o en otro PC para descargar). Visita la página web del fabricante de tu placa base o de tu portátil. Busca el modelo exacto y descarga los controladores más recientes para el chipset y los controladores USB para Windows 11. Transfiérelos a tu PC (con una unidad USB que funcione en otro puerto o si logras que alguno funcione) e instálalos manualmente.
Consejo: Prioriza los controladores del chipset de tu CPU (Intel/AMD) y luego los de los controladores USB de tu placa base. 💡
- Revertir a un Punto de Restauración del Sistema:
Si creaste un punto de restauración antes de la actualización (o Windows lo hizo automáticamente), puedes revertir el sistema a un estado anterior donde todo funcionaba correctamente. Desde „Opciones avanzadas” en la pantalla de „Reparación automática”, selecciona „Restaurar sistema”.
- Desinstalar la Actualización 24H2:
Desde el Modo Seguro, puedes deshacer la actualización problemática. Ve a „Configuración” > „Windows Update” > „Historial de actualizaciones” > „Desinstalar actualizaciones”. Busca la actualización 24H2 (a menudo identificada por KBxxxxxxx) y desinstálala. Esto debería devolverte a la versión anterior de Windows 11.
Nota: Si no puedes acceder a la interfaz gráfica, puedes intentarlo desde la línea de comandos en la pantalla de „Reparación automática” > „Solucionar problemas” > „Opciones avanzadas” > „Símbolo del sistema”. Usa comandos como
wmic qfe list brief /format:table
para ver las actualizaciones instaladas ywusa /uninstall /kb:XXXXXXX
para desinstalar una específica. Esto es para usuarios avanzados. ⚠️
2. Actualizar el BIOS/UEFI de tu Placa Base
En ocasiones, la raíz de la incompatibilidad puede ser el firmware de tu placa base. Una versión desactualizada del BIOS/UEFI podría no manejar correctamente los nuevos requisitos o la gestión de energía de Windows 11 24H2.
- Consulta el sitio web del fabricante: Busca el modelo exacto de tu placa base o portátil.
- Descarga la última versión del BIOS/UEFI: Sigue las instrucciones del fabricante con EXTREMA PRECAUCIÓN. Una actualización fallida del BIOS puede inutilizar tu placa base. ⚠️
- Generalmente, implica poner el archivo en una unidad USB, reiniciar el PC y acceder a la interfaz del BIOS para iniciar el proceso.
3. Ejecutar Herramientas de Diagnóstico y Reparación
Desde la línea de comandos (accediendo mediante las opciones avanzadas de arranque, como mencionamos antes), puedes ejecutar:
sfc /scannow
: Para buscar y reparar archivos de sistema corruptos.dism /online /cleanup-image /restorehealth
: Para reparar la imagen de Windows y asegurar que las reparaciones de SFC funcionen correctamente.
4. Restablecer Windows (Como último recurso)
Si ninguna de las soluciones anteriores funciona, la opción de restablecer Windows podría ser necesaria. Puedes elegir entre „Mantener mis archivos” o „Quitar todo”.
- Desde la pantalla de „Reparación automática” > „Solucionar problemas” > „Restablecer este PC”.
- Aunque „Mantener mis archivos” conserva tus datos personales, es una medida drástica. Asegúrate de haber realizado una copia de seguridad si puedes acceder a tus archivos de alguna manera (por ejemplo, conectando el disco duro a otro PC). 💾
5. Volver a la Versión Anterior de Windows
Windows ofrece una ventana de tiempo (generalmente 10 días) para revertir a la versión anterior del sistema operativo después de una actualización importante. Si aún estás dentro de ese plazo y logras acceder a las opciones avanzadas de arranque:
- Ve a „Solucionar problemas” > „Opciones avanzadas” > „Volver a la versión anterior”.
- Esta es a menudo la solución más rápida si el problema es directamente atribuible a la actualización. ✅
🛡️ Prevención: Evita futuras frustraciones
La experiencia con Windows 11 24H2 y los problemas de USB/teclado nos deja valiosas lecciones:
- Copia de Seguridad Regular: Antes de cualquier actualización importante del sistema operativo, haz una copia de seguridad completa de tus datos y, si es posible, una imagen de tu sistema. Herramientas como Acronis True Image o Macrium Reflect pueden ser tus mejores aliados.
- Investiga antes de Actualizar: No te precipites. Espera unos días o semanas después de que se lance una actualización importante y busca en foros y noticias si hay problemas conocidos de compatibilidad o fallos graves.
- Gestiona tus Actualizaciones: Puedes pausar las actualizaciones de Windows por un tiempo en la configuración. Esto te da margen para investigar y esperar a que Microsoft resuelva los problemas iniciales.
- Mantén tus Drivers al Día: No confíes únicamente en Windows Update. Visita periódicamente el sitio web del fabricante de tu placa base, tarjeta gráfica y otros componentes clave para descargar e instalar los controladores más recientes y estables.
Mi Opinión: ¿Qué significa esto para el usuario?
La recurrencia de problemas críticos con las actualizaciones de Windows es una fuente constante de frustración para la comunidad de usuarios. La promesa de una experiencia de usuario fluida y sin interrupciones se ve, una vez más, empañada por fallos que pueden dejar un equipo completamente inutilizable. Entendemos la complejidad de un sistema operativo que debe interactuar con una miríada de configuraciones de hardware, pero la deshabilitación de componentes básicos como los dispositivos de entrada es un fallo que impacta directamente en la productividad y confianza del usuario.
„Los problemas con la actualización Windows 11 24H2 que deshabilitan teclados y USB no son solo un inconveniente técnico; son un recordatorio de que, a pesar de los avances, la fiabilidad sigue siendo el pilar fundamental de la experiencia informática. Microsoft debe priorizar la estabilidad y la compatibilidad universal en sus lanzamientos, incluso si ello implica retrasar una característica o una versión.”
Como usuarios, nuestra mejor defensa es el conocimiento y la precaución. Estar informados y saber cómo actuar en estos escenarios nos empodera, transformando la desesperación en una hoja de ruta para la solución. 🖥️
Conclusión: Recuperando el Control y la Confianza
Enfrentarse a un ordenador que no responde tras una actualización puede ser un verdadero desafío, pero como hemos visto, existen múltiples vías para abordar y resolver el problema de los teclados y USB deshabilitados por Windows 11 24H2. Desde soluciones básicas en Modo Seguro hasta la reinstalación de controladores o la reversión de la actualización, la clave está en la paciencia y en seguir los pasos metódicamente.
Esperamos que esta guía detallada te haya proporcionado las herramientas y la confianza necesarias para superar este obstáculo. Recuerda, la comunidad tecnológica es un recurso valioso; si has encontrado una solución diferente o tienes consejos adicionales, ¡compártelos! Juntos, podemos construir una experiencia Windows más robusta y sin sorpresas desagradables. ¡Mucho ánimo y que tus periféricos vuelvan a la vida! ✅