Imagina esta situación: tu ordenador ha estado actuando de forma extraña, lento, con errores. Decides tomar la decisión valiente de darle un nuevo comienzo, de restablecer tu PC para que vuelva a ser ese equipo rápido y eficiente que una vez conociste. Iniciaste el proceso de restablecimiento, te armaste de paciencia y dejaste que hiciera su magia. Pero, horas después, vuelves a mirar la pantalla y ahí está, esa temida cifra: 35%. La barra de progreso no se mueve, y el tiempo parece haberse detenido. La frustración y la ansiedad comienzan a apoderarse de ti. ¿Qué demonios ha pasado? ¿Está tu máquina irremediablemente rota? No te preocupes, no estás solo. Este es un problema sorprendentemente común, y estamos aquí para guiarte paso a paso sobre qué hacer.
Entendemos tu angustia. Un equipo inoperable puede ser un verdadero dolor de cabeza, especialmente en nuestra vida digital donde dependemos de él para trabajar, estudiar o simplemente relajarnos. Pero antes de entrar en pánico o lanzar tu dispositivo por la ventana (¡por favor, no lo hagas!), es fundamental comprender por qué puede ocurrir esto y, lo más importante, cómo podemos intentar solucionarlo.
El Misterio del 35%: ¿Por Qué se Congela el Proceso de Restablecimiento?
Cuando un equipo se atasca al restablecer Windows en un porcentaje específico, como el 35%, 60% o cualquier otro, no suele ser una señal aleatoria. Hay razones subyacentes que provocan esta interrupción. Comprenderlas nos ayuda a abordar el problema de manera más eficaz:
- Corrupción de Archivos del Sistema: Quizás la razón más común. Si los archivos de Windows necesarios para completar el restablecimiento están dañados o faltan, el proceso simplemente no puede continuar. Esto puede deberse a apagados incorrectos, virus o fallos de software.
- Problemas con el Disco Duro o SSD: Unidades de almacenamiento con sectores defectuosos o que están empezando a fallar pueden impedir que el sistema escriba o lea los datos necesarios para una instalación limpia. El equipo intenta acceder a una parte del disco que no responde, y se detiene.
- Interrupciones de Energía: Una fluctuación o corte de energía durante el restablecimiento puede corromper los archivos de instalación y dejar el proceso en un estado inconsistente. Por eso es vital una fuente de energía estable, especialmente en portátiles con batería baja.
- Controladores Incompatibles o Defectuosos: Aunque menos frecuente durante un restablecimiento completo, en algunas etapas el sistema puede intentar cargar o configurar controladores. Si estos son antiguos o incompatibles, pueden causar un bloqueo.
- Archivos de Instalación de Windows Dañados: Si utilizaste un medio de instalación de Windows (USB o DVD) que estaba corrupto, los archivos que intenta copiar al disco podrían ser defectuosos, deteniendo el proceso.
- Problemas de Hardware: Aunque raro, una memoria RAM defectuosa u otros componentes podrían interferir con la estabilidad necesaria para un proceso tan intensivo como un restablecimiento.
Primeros Auxilios: Mantén la Calma y Observa (¡Paciencia!) ⏳
Antes de tomar cualquier medida drástica, es crucial ejercer la paciencia. Sabemos que es difícil, pero a veces, lo que parece un bloqueo es simplemente un proceso que toma más tiempo del esperado. Un restablecimiento de fábrica puede tardar varias horas, dependiendo de la velocidad de tu disco, la cantidad de datos a borrar y la potencia general del equipo.
- Busca Señales de Actividad: ¿La luz de actividad del disco duro parpadea? ¿Puedes oír el ventilador trabajando? ¿Hay algún sonido, aunque sea débil, de que el ordenador está procesando algo? Si la respuesta es sí, por favor, espera. Dale al menos 3-4 horas, o incluso más, antes de asumir que está realmente atascado. A veces, Windows se toma su tiempo para verificar y organizar los archivos del sistema.
- No Desesperes con Apagados Inmediatos: Apagar y encender repetidamente un equipo durante un proceso crítico puede empeorar la situación, corrompiendo aún más los datos. Si hay actividad, déjalo trabajar.
Cuando la Paciencia se Agota: Opciones de Reinicio Forzado (con Cuidado) ⚠️
Si han pasado muchas horas (más de 6-8) y no hay ninguna señal de actividad, o el porcentaje sigue exactamente igual, es probable que el proceso se haya atascado de verdad. En este punto, no queda más remedio que realizar un reinicio forzado. Este paso debe hacerse con precaución, ya que siempre existe un pequeño riesgo de dañar aún más el sistema o el disco. Sin embargo, en esta situación, la alternativa es tener un equipo permanentemente inoperativo.
- Mantén Presionado el Botón de Encendido: Simplemente mantén pulsado el botón de encendido de tu PC durante unos 5-10 segundos, hasta que el equipo se apague por completo.
- Desconecta la Alimentación: Una vez apagado, si es un equipo de escritorio, desconecta el cable de alimentación de la toma de corriente. Si es un portátil, retira la batería si es extraíble (si no lo es, basta con apagarlo forzadamente). Déjalo así unos minutos.
- Reinicia el Equipo: Vuelve a conectar todo y enciende tu máquina.
Al reiniciar, es posible que ocurra una de estas cosas:
- El restablecimiento se reanuda y, milagrosamente, se completa.
- El equipo vuelve a intentar el restablecimiento y se vuelve a atascar.
- El sistema te lleva automáticamente al Entorno de Recuperación de Windows (WinRE).
- El sistema te muestra un mensaje de error o no arranca en absoluto.
Si tu equipo se atascó de nuevo o muestra un error de arranque, lo más probable es que necesitemos usar las herramientas avanzadas de recuperación.
Accediendo al Santuario: El Entorno de Recuperación de Windows (WinRE) ⚙️
El Entorno de Recuperación de Windows (WinRE) es tu mejor amigo cuando el sistema operativo se niega a arrancar o se comporta de forma errática. Es una pequeña instalación de Windows que se ejecuta de forma independiente y te permite acceder a varias herramientas de diagnóstico y reparación.
Para acceder a WinRE, a menudo necesitarás interrumpir el proceso de arranque de Windows varias veces:
- Enciende tu PC.
- Tan pronto como veas el logo de Windows, o la pantalla negra antes del logo (antes de que intente cargar completamente el sistema operativo), mantén presionado el botón de encendido hasta que el equipo se apague.
- Repite este proceso 2 o 3 veces.
- La cuarta vez que enciendas el PC, Windows debería detectar que no se ha iniciado correctamente y te presentará la pantalla de „Preparando reparación automática” o „Su PC no se inició correctamente”, que te dará la opción de ir a las „Opciones avanzadas”.
Una vez en las „Opciones avanzadas”, selecciona „Solucionar problemas” para acceder a las herramientas de rescate.
Herramientas de Rescate en WinRE: Tu Caja de Herramientas Digital 🛠️
Dentro de „Solucionar problemas”, encontrarás varias opciones útiles. Aquí te explicamos cuáles son las más relevantes en tu situación:
1. Restaurar Sistema 💾
Esta opción te permite revertir el estado de tu sistema a un punto de restauración anterior. Si creaste puntos de restauración regularmente (o Windows los hizo automáticamente antes de actualizaciones importantes), esta puede ser una solución mágica. No afecta tus archivos personales, solo los archivos del sistema, programas instalados y configuraciones.
- Cómo usarla: Selecciona „Restaurar sistema”, elige un punto de restauración anterior al momento en que comenzaste el restablecimiento o cuando los problemas empezaron, y sigue las instrucciones.
2. Reparación de Inicio 💻
Esta herramienta intenta solucionar automáticamente los problemas que impiden que Windows se cargue correctamente. Aunque no siempre resuelve todos los problemas, es un buen punto de partida para que el sistema intente una recuperación automática de Windows.
- Cómo usarla: Selecciona „Reparación de Inicio” y deja que el sistema analice y repare los problemas.
3. Símbolo del Sistema (¡Poderoso!) 📊
Aquí es donde puedes usar comandos avanzados para diagnosticar y reparar tu sistema. Es un poco más técnico, pero increíblemente efectivo.
sfc /scannow
: Este comando (System File Checker) escanea e intenta reparar archivos de sistema de Windows corruptos.
sfc /scannow
chkdsk /f /r
: Este comando (Check Disk) examina tu disco duro en busca de errores lógicos y físicos (sectores defectuosos) e intenta repararlos. La „f” repara errores y la „r” localiza sectores defectuosos e intenta recuperar la información legible. Puede tardar mucho tiempo.
chkdsk c: /f /r
(asumiendo que C: es tu unidad de Windows)- DISM (Deployment Image Servicing and Management): Aunque su uso más potente es con una imagen de Windows externa, puedes intentar una reparación básica. *En el Entorno de Recuperación, los comandos DISM a menudo requieren una fuente de instalación de Windows, así que los anteriores son más accesibles. Si los otros fallan y tienes un USB de instalación, podrías probar `DISM /Image:C: /Cleanup-Image /RestoreHealth /Source:D:Sourcesinstall.wim /LimitAccess` (cambiando C: y D: por las letras de tu unidad de Windows y el USB respectivamente).*
4. Restablecer este PC 🔄
Sí, irónicamente, puedes intentar el proceso de restablecimiento del PC de nuevo desde WinRE. Aquí tendrás dos opciones:
- Mantener mis archivos: Intenta reinstalar Windows conservando tus datos personales.
- Quitar todo: Borra todo, incluyendo tus archivos personales y reinstala Windows. Esta es la opción más „limpia” y a menudo la más efectiva si el problema persiste, pero sacrifica tus datos si no tienes una copia de seguridad.
Si la primera opción falló, es recomendable probar la segunda si tus datos están respaldados.
Un consejo de oro: Antes de proceder con cualquier opción que implique la eliminación de datos, como „Quitar todo” o una reinstalación limpia, asegúrate de haber intentado todas las vías posibles para recuperar tus archivos. ¡La prevención es clave!
El Último Recurso: Reinstalación Limpia de Windows 💿
Si ninguna de las herramientas de WinRE funciona, y tu PC sigue atascado en el 35% o no arranca, una reinstalación limpia de Windows es la solución más radical, pero a menudo la más efectiva. Esto borrará todo de tu disco principal y reinstalará una copia fresca del sistema operativo. Necesitarás un medio de instalación de Windows (USB o DVD) creado desde otro equipo funcionando.
- Prepara un Medio de Instalación: Desde otro PC, descarga la „Herramienta de creación de medios de Windows” (Media Creation Tool) de la web oficial de Microsoft. Úsala para crear un USB o DVD de arranque con Windows 10 u 11.
- Arranca desde el Medio: Conecta el USB/DVD a tu PC atascado. Enciende el equipo y, en cuanto aparezca el logo del fabricante, presiona repetidamente la tecla para acceder al menú de arranque (suele ser F2, F10, F12, Supr o Esc, varía según el fabricante). Selecciona arrancar desde tu USB/DVD.
- Sigue el Asistente de Instalación:
- Selecciona tu idioma y región.
- Haz clic en „Instalar ahora”.
- Cuando te pregunte el tipo de instalación, elige „Personalizada: Instalar solo Windows (avanzado)”.
- Aquí es donde debes tener EXTREMO CUIDADO. Verás una lista de particiones. Selecciona la partición principal donde Windows estaba instalado (generalmente la de mayor tamaño, etiquetada como „Sistema operativo” o similar) y haz clic en „Eliminar”. Repite este paso con cualquier otra partición de recuperación que no quieras mantener. Esto borrará todos los datos de esas particiones.
- Luego, selecciona el espacio no asignado y haz clic en „Nuevo” para crear una nueva partición, o simplemente selecciona el espacio no asignado y haz clic en „Siguiente” para que Windows cree las particiones automáticamente.
- Elige la partición donde quieres instalar Windows y haz clic en „Siguiente”.
- Completa la Instalación: El proceso de instalación comenzará y, si todo va bien, se completará sin problemas.
Consideraciones de Hardware: ¿Es un Problema Más Profundo? 💽⚡
Si incluso una instalación limpia falla, o se atasca de nuevo en el 35%, es hora de considerar que el problema podría ser de hardware. Las dos principales causas son:
- Memoria RAM Defectuosa: Una RAM inestable puede causar errores aleatorios durante procesos intensivos. Si tienes más de un módulo de RAM, intenta quitar uno y probar, luego el otro. También puedes ejecutar herramientas de diagnóstico de memoria como Windows Memory Diagnostic (desde WinRE) o MemTest86 (desde un USB de arranque).
- Fallo del Disco Duro/SSD: Si el disco tiene fallos físicos importantes, ningún software podrá funcionar correctamente. Un reinicio constante o una instalación que se atasca son señales claras. Si es posible, conecta tu disco a otro ordenador como disco secundario para verificar si es accesible y si los programas SMART reportan errores. Si el disco está fallando, necesitarás reemplazarlo.
- Fuente de Alimentación Inestable: Una fuente de alimentación que no entrega energía constante y suficiente puede causar inestabilidad. Esto es más difícil de diagnosticar sin equipo especializado, pero es una posibilidad a considerar en casos persistentes.
Si sospechas un problema de hardware, podría ser el momento de buscar la ayuda de un técnico profesional.
¡Salvando tus Recuerdos! La Importancia de la Copia de Seguridad 🖼️📁
Antes de embarcarte en cualquier solución destructiva (como „Quitar todo” o una instalación limpia), tu prioridad número uno debe ser intentar recuperar tus datos. Si puedes acceder a WinRE y al Símbolo del Sistema, puedes intentar copiar archivos a una unidad USB externa. También, si tienes acceso físico al disco (si es un equipo de escritorio o un portátil donde es fácil quitar el disco), puedes extraerlo y conectarlo a otro ordenador como unidad secundaria para copiar tus archivos. Hay herramientas de recuperación de datos (como Recuva, EaseUS Data Recovery) que también pueden ser útiles.
Este es el momento en que muchos lamentan no haber hecho una copia de seguridad regularmente. ¡Que esta experiencia te sirva de lección para el futuro!
Una Opinión Basada en la Experiencia: La Realidad de los Procesos de Recuperación
En mi experiencia, y tras observar innumerables casos de usuarios, los procesos de restablecimiento de Windows, si bien son una herramienta invaluable para refrescar el sistema, no son infalibles. El „35%” o cualquier otro porcentaje atascado es una anomalía demasiado frecuente para ser ignorada. Refleja la complejidad inherente a la gestión de un sistema operativo, donde la interconexión entre hardware, software, controladores y archivos críticos es tan densa que un solo eslabón débil puede romper toda la cadena.
A menudo, estos fallos no se deben a un error del usuario, sino a la acumulación de pequeñas corrupciones, actualizaciones fallidas o incluso la degradación natural del hardware con el tiempo. Microsoft ha mejorado enormemente sus herramientas de recuperación, pero no pueden prever todas las posibles combinaciones de fallos. Por eso, la verdadera resiliencia del usuario de PC moderno no radica solo en saber cómo solucionar los problemas, sino en estar preparado para ellos. La adopción de copias de seguridad robustas y la comprensión básica de las herramientas de diagnóstico son, en la era actual, tan importantes como saber usar el propio sistema operativo.
Prevención: Evita Futuras Frustraciones ✅
Una vez que hayas recuperado tu equipo, o si simplemente quieres evitar esta pesadilla, aquí tienes algunas medidas preventivas:
- Copias de Seguridad Regulares: ¡No puedo enfatizar esto lo suficiente! Usa servicios en la nube (OneDrive, Google Drive), discos duros externos o programas de respaldo para tus archivos más importantes.
- Puntos de Restauración del Sistema: Asegúrate de que los puntos de restauración estén activados en tu unidad de sistema. Windows los crea automáticamente antes de actualizaciones importantes, pero puedes crear uno manualmente antes de hacer cambios significativos.
- Actualizaciones de Windows y Controladores: Mantén tu sistema operativo y tus controladores actualizados. A menudo, las actualizaciones incluyen correcciones de errores y mejoras de estabilidad.
- Apagado Correcto: Siempre apaga tu PC de forma adecuada. Evita desconectar la alimentación directamente o apagarlo a la fuerza a menos que sea absolutamente necesario.
- Mantenimiento del Disco: De vez en cuando, ejecuta
chkdsk
para verificar la salud de tu disco.
Conclusión: Recupera el Control y Sigue Adelante
Ver tu PC atascado en el 35% durante un restablecimiento es una experiencia desalentadora, sin duda. Pero como hemos visto, no es el fin del mundo. Con paciencia, las herramientas adecuadas y un enfoque metódico, la mayoría de las veces se puede resolver este problema de Windows. Desde un simple reinicio forzado hasta una reinstalación completa, hay un camino a seguir. Lo más importante es mantener la calma, seguir los pasos lógicamente y, sobre todo, aprender de la experiencia para proteger tus datos y tu tranquilidad en el futuro. ¡Tu PC volverá a funcionar, y tú habrás adquirido una valiosa lección!