Ah, la GTX 960. Un nombre que evoca recuerdos en muchos entusiastas del gaming. Lanzada por NVIDIA en 2015, esta tarjeta gráfica se ganó rápidamente un lugar en el corazón de los jugadores por su excelente relación rendimiento-precio. Fue la compañera ideal para disfrutar de los títulos de la época en resolución 1080p sin desembolsar una fortuna. Pero, ¿qué pasa casi una década después? El panorama del gaming ha evolucionado drásticamente, con gráficos cada vez más complejos y tecnologías innovadoras. Nos sumergimos en un análisis exhaustivo para determinar si esta veterana GPU sigue siendo una opción viable para jugar hoy en día, o si su tiempo ya ha pasado.
Un Viaje al Pasado: ¿Qué Fue la GTX 960?
La NVIDIA GeForce GTX 960 llegó al mercado como una solución de gama media basada en la arquitectura Maxwell. Se presentó en variantes de 2GB y 4GB de memoria VRAM GDDR5, con una interfaz de memoria de 128 bits. En su momento, fue el equilibrio perfecto entre eficiencia energética y capacidad gráfica, permitiendo disfrutar de juegos como The Witcher 3, GTA V o Fallout 4 con una fluidez admirable en configuraciones medias-altas a 1080p. Su éxito residía en ofrecer una experiencia de juego satisfactoria sin tener que invertir en las tarjetas tope de gama, consolidándose como una de las mejores tarjetas gráficas para muchos con un presupuesto ajustado.
El Desafío Actual: ¿Cómo Rinde la GTX 960 Hoy?
El paso del tiempo es implacable en el mundo de la tecnología, y el hardware de gaming no es una excepción. Para evaluar el rendimiento de la GTX 960 en la actualidad, debemos dividir los títulos en varias categorías:
Juegos Esport y Títulos Menos Exigentes 🎮
Aquí es donde la GTX 960 aún brilla. Si tu pasión son los esports o juegos con requisitos gráficos modestos, esta tarjeta aún ofrece una experiencia muy competente. Títulos como:
- Counter-Strike 2
- Valorant
- League of Legends
- Dota 2
- Rocket League
- Minecraft
…correrán sin problemas a 1080p, con tasas de fotogramas elevadas (más de 60 FPS) y en configuraciones de calidad alta o incluso máxima. Para este tipo de juegos, la GTX 960 es todavía una compañera leal y económica, demostrando que su arquitectura, aunque antigua, sigue siendo capaz en escenarios controlados.
Juegos AAA Moderados/Antiguos
Pasamos a la prueba de fuego de los grandes nombres que definieron la era de la GTX 960. ¿Cómo se defienden hoy? Para títulos como:
- Grand Theft Auto V
- The Witcher 3: Wild Hunt
- DOOM (2016)
- Skyrim Special Edition
- Red Dead Redemption 2 (con ajustes)
La GTX 960 aún puede ofrecer una experiencia jugable a 1080p. Sin embargo, será necesario realizar sacrificios importantes en la calidad gráfica. Hablamos de configuraciones medias o incluso bajas para mantener una tasa de fotogramas aceptable, generalmente en el rango de los 30-45 FPS. La versión de 4GB de VRAM muestra una ligera ventaja aquí, permitiendo texturas de mayor calidad antes de saturar la memoria, pero el rendimiento bruto del chip sigue siendo el principal factor limitante.
Juegos AAA Modernos y Exigentes 📉
Aquí es donde la cruda realidad se impone. Los juegos más recientes y exigentes, aquellos desarrollados con las últimas APIs y motores gráficos, ponen a la GTX 960 contra las cuerdas. Títulos como:
- Cyberpunk 2077
- Alan Wake 2
- Starfield
- Baldur’s Gate 3
- Hogwarts Legacy
Estos juegos son un reto insuperable para la GTX 960. Incluso en las configuraciones más bajas posibles y a 1080p, la tarjeta luchará por mantener unos 30 FPS estables. En muchos casos, la experiencia será frustrante, con caídas de fotogramas constantes y una calidad visual muy degradada. La falta de VRAM (especialmente los modelos de 2GB) y la ausencia de soporte para tecnologías modernas como el Ray Tracing o el DLSS son limitaciones insalvables para estas producciones actuales.
Factores Clave que Influyen en su Viabilidad
VRAM: El Talón de Aquiles
La memoria de vídeo es uno de los cuellos de botella más evidentes. Si bien 2GB o 4GB eran suficientes hace años, las texturas de alta resolución de los juegos modernos pueden consumir fácilmente más de 6GB, e incluso 8GB o más. Esto obliga a la GTX 960 a recurrir a la memoria RAM del sistema, lo que ralentiza drásticamente el proceso y provoca una experiencia entrecortada. Es el principal motivo por el que, incluso con un buen procesador, el rendimiento puede ser deficiente en títulos recientes.
Arquitectura Maxwell: Eficiente pero Anticuada
La arquitectura Maxwell era innovadora por su eficiencia, pero carece de las unidades de hardware dedicadas que trajeron las generaciones posteriores para el Ray Tracing (RT Cores) o el escalado por IA (Tensor Cores). Esto significa que la GTX 960 no solo no puede ejecutar estas características, sino que su eficiencia en el procesamiento de ciertas instrucciones gráficas modernas es inferior a la de GPUs más nuevas, incluso de gama baja.
El Resto del Equipo: CPU y RAM
No podemos olvidar que la tarjeta gráfica es solo una pieza del puzzle. Un procesador antiguo o insuficiente, o una cantidad de RAM limitada (menos de 16GB), pueden crear un cuello de botella que impida que la GTX 960, por muy veterana que sea, rinda a su máximo potencial. Para una evaluación justa, asumimos que la GPU está acompañada por un sistema equilibrado.
Resolución: 1080p es su Límite Absoluto
La GTX 960 fue diseñada para el gaming a 1080p. Cualquier intento de jugar a resoluciones superiores como 1440p o 4K es una quimera. Olvídate de ello, la tarjeta simplemente no tiene la capacidad de procesamiento para mover tantos píxeles con una fluidez aceptable.
¿Para Quién Sigue Siendo una Opción? 👍
A pesar de sus limitaciones, la GTX 960 aún puede tener un propósito en ciertos escenarios específicos:
- Jugadores con Presupuesto Extremadamente Ajustado: Si tu presupuesto es casi nulo y encuentras una GTX 960 a un precio irrisorio (menos de 50-60 euros), y solo te interesan juegos ligeros o esports, podría ser una solución temporal.
- Sistemas de Gaming Secundarios o para Niños: Perfecta para un PC secundario en casa o para que los más pequeños de la casa jueguen a títulos como Roblox, Fortnite (con ajustes bajos) o Minecraft.
- Fans de Juegos Retro o Indie: Si tu biblioteca se compone principalmente de títulos clásicos, indies o emuladores, la GTX 960 es más que suficiente.
- Usuarios que Ya la Tienen y No Pueden Actualizar: Si ya posees una y no tienes los recursos para una actualización, es comprensible que quieras exprimirla al máximo. Con paciencia y ajustes, aún se pueden disfrutar algunos títulos antiguos.
Alternativas y Valor en el Mercado de Segunda Mano 💰
Si estás pensando en adquirir una GTX 960 de segunda mano, es crucial analizar su valor real. Actualmente, se pueden encontrar unidades por precios que oscilan entre los 40 y los 70 euros, dependiendo del estado y la versión (2GB o 4GB).
Sin embargo, a menudo es más sensato considerar alternativas en el mismo mercado de ocasión que, por un desembolso ligeramente mayor, ofrecen un salto de rendimiento considerable y una mayor longevidad:
- AMD Radeon RX 570/580 (4GB o 8GB): Por un precio similar o ligeramente superior, estas tarjetas ofrecen un rendimiento significativamente mejor en la mayoría de los juegos, especialmente con más VRAM.
- NVIDIA GeForce GTX 1060 (3GB o 6GB): La sucesora natural de la GTX 960, ofrece un aumento considerable de rendimiento y una mayor eficiencia en títulos DX12. La versión de 6GB es particularmente interesante.
- NVIDIA GeForce GTX 1650 Super o RX 6600 (si el presupuesto se estira un poco más): Estas ya son tarjetas de una generación posterior que ofrecen un rendimiento mucho más sólido y son capaces de ejecutar la mayoría de los juegos actuales a 1080p con ajustes medios-altos.
La relación calidad-precio de una GTX 960 hoy en día es cuestionable si hay que comprarla. Su valor radica principalmente en seguir siendo útil para aquellos que ya la poseen.
La Actualización: ¿Cuándo es el Momento?
El momento de actualizar tu PC y reemplazar la GTX 960 llega cuando los juegos que deseas disfrutar ya no corren de manera satisfactoria, o cuando simplemente no puedes ejecutarlos. Si los constantes ajustes gráficos y las bajas tasas de fotogramas te impiden disfrutar de tu afición, es una señal clara. El salto a una GPU moderna de gama media puede transformar por completo tu experiencia de juego, abriendo las puertas a gráficos más inmersivos y una jugabilidad más fluida.
Veredicto Final: ¿Merece la Pena la GTX 960 en 2024?
Después de un análisis minucioso, la respuesta es compleja y matizada. La GTX 960 no es una tarjeta que recomendaríamos comprar hoy en día si tu objetivo principal es jugar a los títulos más recientes. Sus limitaciones de VRAM, la ausencia de tecnologías modernas y su potencia bruta ya no están a la altura de las demandas actuales. Es un „no” rotundo para el gaming AAA de última generación.
La GTX 960 en 2024 es como un corredor de maratón legendario que ahora participa en carreras de velocidad. Su espíritu y resistencia son innegables, pero la naturaleza de la competición ha cambiado demasiado para que pueda competir por los primeros puestos. Aún puede ganar en su categoría de edad, pero no en la general.
Sin embargo, para aquellos que ya la poseen y tienen un presupuesto muy ajustado, o para quienes se centran exclusivamente en juegos ligeros, esports o títulos antiguos, la GTX 960 todavía tiene un último aliento. Es una tarjeta que sigue cumpliendo su función de mostrar imagen y permitir el ocio digital básico. Es un „sí” condicional para nichos muy específicos.
Conclusión
La NVIDIA GTX 960 fue, sin duda, una tarjeta gráfica fantástica en su momento, un verdadero caballo de batalla que democratizó el gaming en 1080p. Su legado es innegable. Pero el tiempo, como bien sabemos, no perdona. En 2024, su capacidad para afrontar los desafíos gráficos más recientes es muy limitada. Si ya la tienes y estás contento con juegos menos exigentes, sigue disfrutándola. Pero si buscas adentrarte en el fascinante mundo de los AAA modernos o estás pensando en adquirir una GPU de segunda mano, existen opciones más potentes y preparadas para el futuro por un coste similar o un poco mayor. La GTX 960 ha cumplido su ciclo en la primera línea de batalla, pero como un guerrero veterano, aún tiene historias que contar y alguna que otra batalla menor que ganar.