En un mundo donde los smartphones superan habitualmente los mil euros y las tarjetas gráficas pueden costar más que un coche de segunda mano, la idea de adquirir un PC por tan solo 85 € suena, cuanto menos, a ciencia ficción o a una estafa. ¿Es realmente posible hacerse con un equipo funcional por este precio irrisorio? Y, si lo es, ¿qué tipo de experiencia podemos esperar de él? En este análisis exhaustivo, nos sumergiremos en las profundidades del mercado de bajo coste para desentrañar la verdad sobre estos ordenadores ultrabaratos. Prepárate para un viaje lleno de realismo, sorpresas y, sobre todo, mucha información útil para decidir si esta inversión mínima tiene sentido para ti.
¿Qué Implica un Precio Tan Bajo? El Origen de estos Equipos
El primer paso para comprender qué se esconde tras un precio de 85 € es entender de dónde vienen estos equipos. No esperes encontrar una caja brillante y un procesador de última generación. La mayoría de las veces, estamos hablando de unidades que caen en una de estas categorías:
- Equipos Reacondicionados o de Segunda Mano: La fuente más común. Empresas que renuevan su parque informático, organismos públicos o usuarios que simplemente actualizan sus máquinas venden sus equipos antiguos a proveedores especializados en reacondicionamiento. Estos ordenadores suelen ser modelos de oficina (tipo Dell OptiPlex, HP EliteDesk, Lenovo ThinkCentre) que, aunque tienen años, fueron diseñados para una larga vida útil y una estabilidad considerable.
- Thin Clients (Clientes Ligeros): Dispositivos diseñados para conectarse a un servidor remoto y funcionar como terminal. Son muy compactos, energéticamente eficientes y, por su naturaleza, sus componentes internos son muy básicos, ya que la mayor parte del trabajo pesado la realiza el servidor. Sin embargo, con un sistema operativo ligero, pueden transformarse en pequeños PCs independientes.
- Mini PCs de Entrada de Gama: Menos comunes en este rango de precios si son nuevos, pero ocasionalmente aparecen ofertas de unidades con procesadores muy básicos (Intel Atom, Celeron de las series N o J). Suelen ser pasivos (sin ventilador) y muy compactos.
- Placas SBC (Single Board Computers) o Alternativas a Raspberry Pi: Aunque un Raspberry Pi 4 con accesorios ya supera este presupuesto, existen otras placas similares o modelos más antiguos que, con una carcasa básica y una fuente de alimentación, pueden conformar un equipo muy elemental.
El punto clave es que estos ordenadores no son „nuevos” en el sentido moderno de la palabra. Son supervivientes, reciclados o especializados, diseñados para propósitos muy específicos o para una era tecnológica anterior.
Componentes Típicos que Encontrarás (y los que No)
Ahora, entremos en materia: ¿qué especificaciones concretas podemos esperar por 85 €? La configuración exacta variará, pero aquí tienes una idea general de lo que suele incluirse y lo que difícilmente verás:
✅ Lo que es probable que encuentres:
- Procesador (CPU): Un Intel Core 2 Duo o Quad (de hace más de una década), un Intel Celeron (más reciente pero de gama baja), un Intel Atom (para mini PCs o clientes ligeros) o quizás un Intel Core i3 de segunda o tercera generación (si tienes mucha suerte). Son procesadores capaces de ejecutar tareas sencillas, pero se quedan muy cortos para las exigencias actuales.
- Memoria RAM: Habitualmente entre 2 GB y 4 GB de RAM. Lo más común es DDR2 o DDR3, con frecuencias más lentas que las actuales DDR4/DDR5. Con 2 GB, la experiencia será muy limitada; 4 GB ya permiten algo más de holgura.
- Almacenamiento: Casi siempre un Disco Duro Mecánico (HDD) de entre 80 GB y 250 GB. La velocidad de un HDD es el principal cuello de botella en estos equipos, haciendo que el inicio del sistema y la carga de programas sean lentos. En los mini PCs, podrías encontrar un pequeño eMMC de 32 o 64 GB.
- Gráficos: La tarjeta gráfica estará siempre integrada en el procesador o en la placa base. Olvídate de cualquier tipo de tarjeta gráfica dedicada. Son aptas para mostrar el escritorio, navegar y reproducir vídeo básico, pero nada más.
- Conectividad: Puertos USB 2.0 (quizás alguno 3.0 si es un i3 de tercera generación), Ethernet Gigabit, salidas de vídeo VGA o DisplayPort (HDMI es menos común, salvo en mini PCs). Wi-Fi y Bluetooth suelen ser opcionales y pueden requerir adaptadores externos.
- Sistema Operativo: A menudo, vienen sin sistema operativo preinstalado, con una versión de Linux o, en algunos casos, con una instalación de Windows antigua que puede requerir activación.
❌ Lo que es muy improbable (o imposible) que encuentres:
- Unidad de estado sólido (SSD): Los SSD son una rareza en este rango de precios. Si lo traen, será una unidad muy pequeña (32-64 GB) y de las más baratas.
- Procesador moderno: Ni i5, ni Ryzen, ni nada parecido.
- Mucha RAM: Más de 8 GB es impensable, y 4 GB ya es una buena cantidad para este presupuesto.
- Tarjeta gráfica dedicada: Imposible.
- Monitor, teclado o ratón: Normalmente se vende solo la „torre” o la unidad central. Los periféricos tendrás que añadirlos tú.
Para Qué Sí Sirve un PC de 85 € (Los Usos Prácticos)
A pesar de sus modestas especificaciones, un PC económico de 85 € puede ser sorprendentemente útil si se le da el enfoque adecuado. Aquí te mostramos dónde brilla este tipo de equipo:
- Navegación Web Básica: 📧 Si tu principal necesidad es consultar el correo electrónico, visitar redes sociales, leer noticias o hacer búsquedas sencillas, este equipo puede cumplir. Eso sí, con pestañas limitadas y esperando que los sitios web modernos carguen con paciencia.
- Ofimática Sencilla: ✍️ Para escribir documentos, crear hojas de cálculo básicas o presentaciones con programas como LibreOffice (la suite gratuita y de código abierto), un ordenador así es perfectamente viable. Olvídate de ejecutar suites pesadas como Microsoft Office 365 con fluidez.
- Centro Multimedia (HTPC): 🎬 Con un sistema operativo ligero (como Lubuntu o un derivado de Linux Mint) y un software como Kodi, puedes transformar este PC en un reproductor multimedia fantástico para tu salón. Sirve para ver películas y series en streaming (Netflix, YouTube, Plex) en resoluciones de hasta 1080p sin problemas, siempre que la conexión a internet sea buena.
- Servidor Doméstico Básico: 💾 Si te gusta trastear, puedes configurarlo como un pequeño servidor NAS para compartir archivos en tu red local, un Pi-hole para bloquear publicidad en toda tu casa, o un centro de retro gaming para emular consolas clásicas. ¡Las posibilidades son muchas! 🎮
- Aprendizaje y Programación: 🧑💻 Es una plataforma excelente para iniciarse en Linux, aprender programación básica o experimentar con diferentes sistemas operativos sin miedo a estropear tu PC principal. Su bajo coste lo hace ideal para el ensayo y error.
- Terminal de Punto de Venta (TPV) o Caja Registradora: 🏪 Para pequeños comercios que necesitan un sistema básico para gestionar ventas e inventario, estos equipos, combinados con un software de TPV ligero, pueden ser una solución muy económica y funcional.
Para Qué NO Sirve un PC de 85 € (Las Limitaciones Claras)
Tan importante como saber para qué sirve es entender para qué no sirve. Tener expectativas realistas es crucial para no sentirse defraudado. Aquí están las áreas donde un equipo de 85 € simplemente no rendirá:
- Gaming Moderno: 💀 Ni lo pienses. Los juegos actuales requieren tarjetas gráficas potentes, procesadores multicore y mucha RAM. Este PC apenas podrá ejecutar juegos muy antiguos o títulos indie extremadamente ligeros.
- Edición de Vídeo/Foto Profesional: 🖼️ Programas como Adobe Premiere Pro, Photoshop o DaVinci Resolve son extremadamente demandantes. Un PC de 85 € se congelará, tardará horas en renderizar tareas sencillas y hará la experiencia insoportable.
- Diseño Gráfico Avanzado y CAD: 🎨 Lo mismo que con la edición de vídeo. El software de diseño 3D, arquitectura o ingeniería necesita mucha potencia de cálculo y gráficos dedicados.
- Multitarea Intensa: 🐌 Abrir muchas pestañas en el navegador, tener varios programas pesados abiertos simultáneamente y cambiar rápidamente entre ellos es una receta para el desastre. El equipo se ralentizará drásticamente y se volverá inestable.
- Software Pesado y Bases de Datos Grandes: 🛑 Cualquier aplicación empresarial compleja, base de datos de gran tamaño o software científico exigente simplemente no correrá con la fluidez necesaria.
- Uso como PC Principal y Generalista: Si buscas un ordenador para todo, que sea rápido, moderno y sin complicaciones, este no es tu equipo. Su uso debe ser siempre específico y complementario.
Optimizando tu Inversión: Consejos Cruciales
Si decides aventurarte en el mundo de los PCs ultrabaratos, aquí tienes algunos consejos esenciales para exprimir al máximo cada céntimo:
- Elige Bien el Sistema Operativo: Esta es, sin duda, la decisión más importante. Linux es tu mejor amigo. Distribuciones ligeras como Lubuntu, Xubuntu, Linux Mint XFCE o Bodhi Linux están diseñadas para funcionar de maravilla con recursos limitados. Windows 10/11 será demasiado pesado para la mayoría de estos equipos. Evita las versiones „Lite” de Windows que prometen milagros, ya que suelen comprometer la seguridad y la estabilidad.
- Considera un SSD Barato: Si el presupuesto lo permite (y si el equipo tiene un puerto SATA), invertir unos 20-30 € adicionales en un SSD de 120 GB o 240 GB es la mejor mejora que puedes hacer. El cambio de velocidad en el arranque del sistema y la apertura de aplicaciones es radical. Es, de lejos, la mejora con mayor retorno de inversión.
- Añade Más RAM (si es posible): Si tu equipo viene con 2 GB y tiene ranuras libres o soporta módulos de mayor capacidad, ampliar a 4 GB (o idealmente 8 GB si el procesador es compatible y el precio es bueno) marcará una diferencia notable en la fluidez. Asegúrate de verificar el tipo de RAM (DDR2, DDR3) y la velocidad que soporta tu placa base.
- Mantén el Software Ligero: Utiliza navegadores web que consuman pocos recursos (Firefox, Edge con pestañas limitadas, o incluso navegadores más ligeros como Midori o Falkon), suites de ofimática como LibreOffice, y aplicaciones diseñadas para sistemas antiguos o de bajo rendimiento.
- Limpieza y Mantenimiento: Si el PC es de segunda mano, límpialo por dentro (ventiladores, disipador del procesador) y considera cambiar la pasta térmica. Un equipo limpio y bien refrigerado rendirá mejor y durará más.
- Expectativas Realistas: Repito, la clave es entender las limitaciones. No intentes convertir un Seat Panda en un Ferrari. Acéptalo por lo que es: una herramienta funcional para tareas concretas y poco exigentes.
«Un PC de 85 € no es un juguete, ni una solución para todos. Es una herramienta específica que, en las manos adecuadas y con las expectativas correctas, puede ser increíblemente valiosa, liberando recursos económicos para otras prioridades o abriendo la puerta al aprendizaje tecnológico a un coste casi nulo.»
La Opinión del Experto (Basada en Datos)
Entonces, ¿merece realmente la pena? Mi opinión, basada en la experiencia y el análisis de lo que estos equipos ofrecen, es un rotundo „sí”, pero con matices y condiciones muy claras. No es un sí para todos, ni para cualquier uso.
Si tu presupuesto es extremadamente ajustado, si necesitas un equipo secundario para tareas muy específicas (navegación básica, centro multimedia, servidor para pruebas, máquina de escribir digital) o si te apasiona trastear y aprender sobre sistemas operativos y optimización de hardware, entonces un PC por 85 € puede ser una inversión brillante. Te permite entrar en el mundo de la informática o expandir tus capacidades digitales sin descapitalizarte.
La clave de su viabilidad reside en la combinación de Linux y, si es posible, un SSD. Sin estas dos piezas, la experiencia puede ser frustrante. Con ellas, un ordenador que de otro modo sería obsoleto, puede cobrar una nueva vida y ofrecer una fluidez sorprendente para tareas básicas.
Por otro lado, si buscas un equipo para trabajar a diario con aplicaciones exigentes, jugar a videojuegos modernos, editar contenido profesional o simplemente quieres una experiencia fluida y sin pensar en las limitaciones, entonces no, no merece la pena. En ese caso, el ahorro inicial se convertirá en una constante frustración y pérdida de tiempo. Es mejor esperar y ahorrar para un equipo de gama media que te ofrezca la versatilidad y el rendimiento que necesitas.
En definitiva, estos equipos son como un coche clásico restaurado: no es el más rápido, ni el más moderno, pero si sabes valorarlo por lo que es y le das el cuidado adecuado, te puede llevar a muchos sitios y dar muchas alegrías.
Conclusión
El mercado de los PCs por 85 € es una faceta fascinante y, para algunos, una puerta de entrada indispensable al mundo de la informática. No se trata de máquinas milagrosas, sino de herramientas que, con una comprensión clara de sus limitaciones y un enfoque inteligente en su configuración (especialmente con la adopción de Linux y, si el presupuesto lo permite, un SSD), pueden ofrecer un valor excepcional para usos muy concretos.
Es una lección de que el valor no siempre se mide en gigahertzios o gigabytes, sino en la capacidad de una herramienta para satisfacer una necesidad específica dentro de un presupuesto limitado. Así que, la próxima vez que veas una oferta de un PC por 85 €, no lo descartes de inmediato. Puede que, para lo que tú necesitas, sea precisamente la ganga que estabas esperando.