Hace ya unos años, en 2020, irrumpió en el mercado de las televisiones un modelo que, sin saberlo entonces, se convertiría en un auténtico hito: el LG CX OLED. En un panorama televisivo donde la innovación se presenta casi anualmente, pocos dispositivos logran dejar una huella tan profunda y duradera. El LG CX no solo estableció un nuevo estándar en lo que un televisor de consumo podía ofrecer, sino que también democratizó ciertas tecnologías que hasta entonces parecían inaccesibles. Cuatro años después de su lanzamiento, con varias generaciones de OLEDs más recientes en el mercado, la gran pregunta persiste y resuena en foros, grupos de discusión y entre entusiastas de la tecnología: ¿Sigue siendo el LG CX una buena compra en 2024?
Esta es una cuestión que va más allá de una simple lista de especificaciones. Implica evaluar su relevancia actual, su rendimiento frente a la competencia moderna y, crucialmente, su propuesta de valor en un mercado donde las opciones abundan y la tecnología avanza a pasos agigantados. Prepárense para un viaje nostálgico pero riguroso, donde desgranaremos cada aspecto de este icónico televisor para ofrecerles la respuesta definitiva.
El Legado del CX: Un Hito en la Televisión OLED
Cuando el LG CX llegó a las tiendas, lo hizo con una combinación de características que lo catapultaron inmediatamente al estrellato. Fue uno de los primeros televisores OLED en incorporar de serie funcionalidades clave para el gaming de nueva generación, como los puertos HDMI 2.1 completos. Esto significaba compatibilidad con resoluciones 4K a 120 fotogramas por segundo (Hz), tasa de refresco variable (VRR) y modo automático de baja latencia (ALLM), características que lo hicieron indispensable para los propietarios de consolas como la PlayStation 5 y Xbox Series X.
Pero el CX era mucho más que un televisor para gamers. Su calidad de imagen era, y sigue siendo, espectacular. Como buen OLED, ofrecía negros perfectos, un contraste infinito y una precisión de color asombrosa. Su diseño era elegante, minimalista y su sistema operativo, webOS, era rápido e intuitivo. En resumen, el LG CX representaba la cúspide de la tecnología de paneles OLED en su momento, consolidando la reputación de LG como el líder indiscutible en este segmento.
Calidad de Imagen: ¿Aguanta el Tipo Frente a la Competencia Actual?
Aquí es donde el LG CX realmente brilla y demuestra su longevidad. La base de su excepcional rendimiento visual reside en la tecnología OLED: cada píxel se autoilumina, lo que permite apagarlo completamente para mostrar un negro absoluto. Esto se traduce en un contraste que ninguna pantalla LCD puede igualar, con una profundidad y un realismo que transforman la experiencia de visionado.
La fidelidad cromática del CX es otro de sus puntos fuertes. Los colores son vibrantes y naturales, reproducidos con una precisión notable, lo que lo hace ideal tanto para películas como para series o deportes. Los ángulos de visión son prácticamente perfectos, sin pérdida de color ni contraste, una ventaja crucial si su sala de estar permite ver la pantalla desde diferentes puntos.
En cuanto al soporte HDR, el CX es compatible con Dolby Vision, HDR10 y HLG, garantizando que disfrutará del contenido de alto rango dinámico tal como fue concebido por los creadores. La manera en que maneja las zonas oscuras y brillantes simultáneamente es algo que sigue impresionando.
Es cierto que los modelos OLED más recientes, como los LG C3 o C4, incorporan paneles más luminosos (especialmente los basados en la tecnología MLA o los QD-OLED de la competencia). Estos nuevos paneles pueden ofrecer un impacto HDR ligeramente superior en escenas muy brillantes, pero la diferencia en la inmensa mayoría del contenido no es tan abismal como para eclipsar por completo al CX. El nivel de detalle en sombras y la pureza de los negros en el CX siguen siendo tan impactantes hoy como el primer día. La verdad es que, para la mayoría de los usuarios y en la mayoría de los escenarios de visualización, la calidad de imagen del LG CX es más que sobresaliente y sigue estando a la altura de muchos televisores premium de 2024.
Gaming: ¿Todavía es la Opción Perfecta para Jugadores? 🎮
Si eres un entusiasta de los videojuegos, el LG CX fue una revelación en su momento, y sigue siendo una joya. Sus puertos HDMI 2.1 fueron un game changer. Poder jugar a 4K y 120Hz con consolas de última generación o un PC potente era una experiencia transformadora. Además, la compatibilidad con VRR (Variable Refresh Rate), incluyendo NVIDIA G-Sync y AMD FreeSync, elimina el tearing de la pantalla, garantizando una fluidez impecable en la acción.
El Input Lag, crucial para juegos rápidos, es extremadamente bajo en el CX (alrededor de 12ms a 60Hz y 6ms a 120Hz), lo que se traduce en una respuesta instantánea a cada comando. El modo automático de baja latencia (ALLM) asegura que el televisor cambie al modo de juego automáticamente al detectar una señal de consola, simplificando la experiencia.
Aunque los modelos más recientes de LG han introducido características menores como un menú de juego más sofisticado o tiempos de respuesta ligeramente más rápidos (aunque ya eran casi instantáneos en el CX), los fundamentos clave para una experiencia de juego premium siguen intactos y son plenamente funcionales en el LG CX. Para muchos jugadores con un presupuesto ajustado, sigue siendo una opción formidable.
Diseño y Construcción: Elegancia Atemporal ✨
El diseño del LG CX es un ejemplo de minimalismo elegante. Con un perfil increíblemente delgado en la mayor parte de su panel, un bisel casi inexistente que maximiza la pantalla y un soporte central discreto, se integra perfectamente en cualquier ambiente moderno. La calidad de los materiales y el ensamblaje son robustos, transmitiendo una sensación de producto premium que ha aguantado bien el paso del tiempo.
A diferencia de algunos televisores más recientes con patas a los lados, el soporte central del CX ofrece una gran flexibilidad para colocar barras de sonido u otros periféricos sin preocuparse por el ancho del mueble.
Sistema Operativo (webOS) y Conectividad: Funcionalidad y Longevidad 📺
El sistema operativo webOS de LG siempre ha sido uno de los más elogiados por su interfaz limpia, su facilidad de uso y su rapidez. El LG CX vino con una versión de webOS que, aunque no sea la última, sigue siendo perfectamente funcional y recibe actualizaciones importantes de seguridad y rendimiento. Las aplicaciones más populares (Netflix, Disney+, YouTube, HBO Max, etc.) están disponibles y funcionan sin problemas. La navegación es fluida, y el Magic Remote con su puntero y reconocimiento de voz añade un plus de comodidad.
En cuanto a la conectividad, el CX está bien equipado: cuenta con cuatro puertos HDMI 2.1, tres puertos USB, salida de audio óptico, Ethernet y, por supuesto, Wi-Fi y Bluetooth. Es compatible con los principales asistentes de voz, como Google Assistant y Amazon Alexa, lo que permite un control inteligente del televisor y otros dispositivos conectados en el hogar. Todas estas características garantizan que el CX sigue siendo un centro de entretenimiento moderno y bien conectado.
La Gran Pregunta: ¿Sigue Siendo una Buena Compra en 2024?
Aquí es donde entra en juego el factor más decisivo: la disponibilidad y el precio. Nuevo, el LG CX es extremadamente difícil de encontrar, si no imposible. Su valor actual se mide principalmente en el mercado de segunda mano o reacondicionado. Y es aquí donde su propuesta se vuelve irresistible para muchos.
Un LG CX de segunda mano en buen estado, dependiendo del tamaño y del vendedor, puede encontrarse a un precio significativamente inferior al de un LG C3 o C4 nuevo. Para un entusiasta del cine o un gamer con un presupuesto limitado, esta diferencia de precio puede ser la clave.
¿Qué buscar al comprar uno de segunda mano? Es fundamental verificar las horas de uso del panel y realizar pruebas de uniformidad para descartar cualquier señal de retención de imagen o quemado (burn-in). Aunque los OLED de LG son muy resistentes a este fenómeno gracias a sus algoritmos de protección, es una consideración importante. Pida fotos detalladas y, si es posible, vea el televisor en persona.
«El LG CX no es solo un recuerdo nostálgico; es un testamento viviente de que la excelencia tecnológica bien ejecutada puede desafiar el paso del tiempo y seguir ofreciendo una experiencia premium a un valor inigualable en el mercado de ocasión.»
Nuestra Opinión Basada en Datos ✅
Tras analizar cada uno de sus pilares, la respuesta a la gran duda sobre el LG CX en 2024 es un rotundo SÍ, sigue siendo una excelente compra, pero con matices y para un perfil de usuario específico.
Es una compra fantástica si:
- Buscas la mejor calidad de imagen OLED posible con negros perfectos y contraste infinito a un precio asequible en el mercado de segunda mano o reacondicionado.
- Eres un gamer y necesitas todas las funcionalidades HDMI 2.1 (4K@120Hz, VRR, ALLM) sin gastar lo que cuesta un televisor de última generación.
- No te importa que no sea el televisor más brillante del mercado (los modelos más recientes sí ofrecen un poco más de luminosidad, especialmente los QD-OLED, pero no es una diferencia abismal para la mayoría de entornos).
- Estás dispuesto a investigar y verificar el estado del televisor si lo adquieres de segunda mano.
Podrías considerar otras opciones si:
- El dinero no es un problema y quieres la última tecnología con la máxima luminosidad posible (un LG C3/C4, o un QD-OLED de Samsung/Sony).
- No quieres arriesgarte con un televisor de segunda mano y prefieres la garantía de un producto nuevo.
En definitiva, el LG CX se ha ganado su lugar en la historia no solo por lo que fue, sino por lo que sigue siendo. Un televisor que envejece con una dignidad envidiable, manteniendo un rendimiento visual y de juego que rivaliza con modelos mucho más caros y recientes. Si encuentras un LG CX en buen estado a un precio justo, no lo dudes: te llevarás a casa una pieza de ingeniería que continúa ofreciendo una experiencia audiovisual de primera categoría. Su legado perdura, y su valor en 2024 es innegable para quienes buscan la excelencia sin romper la hucha.
La tecnología avanza, sí, pero los fundamentos de la excelencia permanecen. Y el LG CX es una prueba viviente de ello.