En el vertiginoso mundo de la electrónica de consumo, donde cada año surge una nueva generación de dispositivos prometiendo revolucionar nuestra experiencia visual, detenerse a mirar hacia atrás puede parecer contraintuitivo. Sin embargo, algunos productos dejan una huella tan profunda que su legado perdura, haciendo que la pregunta sobre su vigencia sea no solo válida, sino necesaria. Hoy, nos sumergimos en las entrañas de uno de esos televisores que, en su momento, capturó la imaginación de muchos: el LG OLED55B9PLA. Lanzado en 2019, este modelo se posicionó como la puerta de entrada al fascinante universo OLED de LG, ofreciendo una calidad de imagen asombrosa a un precio más accesible que sus hermanos mayores de la serie C o E. Pero, ¿cómo resiste el paso del tiempo? ¿Sigue siendo una compra inteligente en el panorama actual? Acompáñame en este viaje para descubrirlo.
Un Vistazo al Pasado: La Promesa del B9
El LG B9, específicamente el OLED55B9PLA para el mercado europeo, llegó con una misión clara: democratizar la tecnología OLED. En un mercado dominado por paneles LCD, la promesa de negros puros, contraste infinito y colores vibrantes que solo los píxeles autoiluminados pueden ofrecer era un canto de sirena para los entusiastas del cine en casa y los videojuegos. Era un televisor que, a pesar de su etiqueta de „entrada”, compartía el mismo panel de píxeles que los modelos más caros, lo que garantizaba una base de calidad de imagen idéntica. Su principal diferencia residía en el procesador de imagen y, por ende, en algunas capacidades de procesamiento y brillo máximo. Sin embargo, su propuesta de valor era innegable, convirtiéndolo en un favorito instantáneo para muchos.
Calidad de Imagen: El Corazón Indiscutible de un OLED ❤️
Aquí es donde el LG B9 brilla con luz propia, y donde su propuesta sigue siendo increíblemente sólida. La tecnología OLED, por su propia naturaleza, ofrece una experiencia visual que pocos televisores LCD, incluso de gama alta, pueden igualar. Cada píxel se ilumina de forma individual, permitiendo negros absolutos al apagarse por completo. Esto se traduce en:
- Contraste Infinito: La diferencia entre el negro más profundo y el blanco más brillante es, literalmente, abrumadora.
- Colores Vibrantes y Precisos: La pureza de los colores es excepcional, y la calibración de fábrica suele ser muy buena.
- Ángulos de Visión Perfectos: No importa dónde te sientes, la imagen se mantiene consistente en color y contraste, sin la degradación que a menudo se ve en los paneles LCD. 📐
El cerebro detrás de esta maravilla visual es el Procesador α7 Gen2. Si bien no era el α9 de los modelos superiores, el α7 Gen2 hacía un trabajo encomiable en el escalado de contenido de menor resolución a 4K, la reducción de ruido y la optimización del color. Aunque los procesadores actuales han avanzado, el rendimiento del α7 Gen2 sigue siendo muy competente para la gran mayoría de los contenidos. Además, el B9 soporta todos los formatos HDR importantes: HDR10, HLG y el dinámico Dolby Vision, lo que asegura que disfrutarás de tus películas y series favoritas con el máximo rango dinámico posible. La verdad es que, en una habitación con poca luz, la experiencia visual de este televisor es, aún hoy, difícil de superar por su precio en el mercado de segunda mano.
Sonido: Funcional, Pero Mejorable 🔊
Como suele ocurrir con la mayoría de los televisores delgados, el apartado sonoro no era el punto fuerte del LG OLED B9. Sus altavoces integrados ofrecen un sonido estéreo de 2.2 canales con 40W de potencia, lo cual es adecuado para ver las noticias o programas de televisión ocasionales. Sin embargo, para una experiencia cinematográfica inmersiva o para disfrutar de la música, una barra de sonido o un sistema de cine en casa externo son casi obligatorios. Afortunadamente, el B9 soporta paso de audio Dolby Atmos, permitiendo enviar señales de audio envolvente a un receptor compatible, lo que es un gran punto a su favor para la conectividad de audio.
Diseño y Construcción: Elegancia Atemporal ✨
El diseño del LG B9 es, como es habitual en los OLED de LG, elegante y minimalista. La delgadez del panel es impresionante, con apenas unos milímetros de grosor en la parte superior, donde se encuentra la pantalla. La parte inferior, que alberga la electrónica y los puertos, es algo más gruesa pero sigue siendo bastante discreta. Los marcos son mínimos, lo que ayuda a una inmersión total en el contenido. La peana central, aunque no tan robusta como la de modelos superiores, cumple su función y aporta estabilidad. Es un televisor que, colgado en la pared o apoyado en un mueble, sigue luciendo moderno y sofisticado, integrándose a la perfección en cualquier salón.
Conectividad: Un Vistazo al Futuro 🚀 (para su época)
Uno de los aspectos más revolucionarios del LG OLED B9, y que lo hace increíblemente relevante hoy en día, es su suite de conectividad. Fue uno de los primeros televisores de consumo masivo en incorporar cuatro puertos HDMI 2.1 completos. ¡Esto fue una proeza para 2019! ¿Qué significa HDMI 2.1 para nosotros, los usuarios?
- VRR (Variable Refresh Rate): Esencial para los jugadores de consolas de nueva generación (PS5, Xbox Series X) y PC, elimina el desgarro de pantalla y garantiza una experiencia de juego más fluida.
- ALLM (Auto Low Latency Mode): El televisor detecta automáticamente cuando estás jugando y cambia a un modo de baja latencia para reducir el „input lag”.
- eARC (Enhanced Audio Return Channel): Permite enviar formatos de audio de alta resolución (como Dolby Atmos sin pérdidas) a barras de sonido o receptores AV compatibles a través de un único cable HDMI.
- 4K@120Hz: Aunque su procesador α7 Gen2 tenía ciertas limitaciones de ancho de banda respecto al α9 de la época (p. ej., color 4:2:0 en 4K@120Hz en lugar de 4:4:4), la capacidad de aceptar una señal de 120 fotogramas por segundo a resolución 4K era una característica de vanguardia.
Esta inclusión de HDMI 2.1 lo convierte en un televisor excepcionalmente preparado para el futuro, especialmente para los gamers. Además, cuenta con tres puertos USB, Ethernet, Wi-Fi 802.11ac y Bluetooth 5.0, cubriendo todas las necesidades de conectividad habituales.
Smart TV: webOS y el Mando Mágico 🧙
El sistema operativo webOS de LG siempre ha sido uno de los más elogiados del mercado, y en el LG B9 no es la excepción. Su interfaz de usuario es intuitiva, rápida y muy fácil de navegar gracias al icónico Magic Remote. Este mando a distancia, con su puntero giroscópico y capacidad de control por voz, convierte la interacción con el televisor en una experiencia fluida y casi mágica. El ecosistema de aplicaciones es robusto, con acceso a todas las plataformas de streaming populares (Netflix, Disney+, Amazon Prime Video, YouTube, etc.).
Sin embargo, aquí es donde empezamos a notar el paso del tiempo. Las actualizaciones de software para modelos de 2019 son cada vez más escasas o inexistentes. Si bien las aplicaciones clave siguen funcionando, la fluidez general del sistema puede no ser tan instantánea como en las últimas versiones de webOS, y es posible que algunas funciones más modernas o aplicaciones recién lanzadas no lleguen a este modelo. Aun así, para el uso diario, sigue siendo un sistema Smart TV muy competente.
Experiencia Gaming: Un Aliado para Jugadores 🎮
Si eres un entusiasta de los videojuegos, el LG OLED55B9PLA fue y sigue siendo una elección fantástica, especialmente si lo encuentras a un buen precio en el mercado de segunda mano. Su bajo input lag (alrededor de 13 ms en 4K y 6-7 ms en 1080p, según modos), combinado con el tiempo de respuesta instantáneo de los píxeles OLED, se traduce en una experiencia de juego increíblemente fluida y responsiva. Sumado a las características de HDMI 2.1 (VRR, ALLM), el B9 ofrece una ventaja competitiva y una inmersión visual que pocos televisores de su época podían igualar. De verdad, para jugar, es un auténtico placer.
„El LG OLED B9 fue un pionero en la adopción masiva de HDMI 2.1, una característica que, cuatro años después de su lanzamiento, sigue siendo un punto de venta crucial para cualquier televisor enfocado en el futuro del gaming y el entretenimiento.”
Desafíos y Limitaciones con el Paso del Tiempo ⏳
Como con cualquier tecnología, el tiempo no perdona, y el B9 no es inmune a las mejoras que han llegado con las generaciones posteriores. Algunas de sus limitaciones hoy en día incluyen:
- Brillo Máximo: Comparado con los OLED más recientes (especialmente los OLED EVO o QD-OLED) o algunos televisores QLED de gama alta, el B9 no es el más brillante. Si tu sala es muy luminosa, esto podría ser un inconveniente, aunque en habitaciones oscuras su rendimiento es sublime.
- Procesamiento de Imagen: Aunque el α7 Gen2 es bueno, los procesadores α9 Gen3, Gen4, Gen5 y Gen6 de LG han introducido mejoras notables en la gestión de gradientes, la supresión de ruido y la optimización de la imagen por inteligencia artificial.
- Soporte de Software: Como mencionamos, las actualizaciones son limitadas, lo que podría afectar la compatibilidad futura con nuevas apps o funciones.
- Disponibilidad y Garantía: Al ser un modelo descatalogado, solo lo encontrarás en el mercado de segunda mano. Esto significa que la garantía original no existirá, y la condición del panel (riesgo de burn-in o retención de imagen) será una preocupación importante. Es crucial verificar esto antes de la compra.
¿Sigue Valiendo la Pena en la Actualidad? 🤔
Esta es la pregunta del millón, y la respuesta, como suele ocurrir, es: depende. Depende de tus necesidades, tu presupuesto y de la oferta que encuentres.
Sí, Vale la Pena, SI… ✅
- Lo encuentras a un precio excepcional: En el mercado de segunda mano, un LG OLED55B9PLA en excelente estado por debajo de los 600-700€ (en [año actual, ej. 2024]) podría ser una ganga inmejorable.
- Priorizas la calidad de imagen OLED pura: Si los negros perfectos, el contraste y los ángulos de visión son tu máxima prioridad, y sueles ver contenido en un entorno con poca luz, este televisor te seguirá fascinando.
- Eres un Gamer y Quieres HDMI 2.1 sin Arruinarte: Si tienes una consola de nueva generación y quieres aprovechar el VRR, ALLM y 4K@120Hz sin gastar una fortuna en un OLED de última generación, el B9 es una opción muy atractiva.
- Su uso principal es el cine y las series: Para disfrutar de películas en HDR o Dolby Vision, su rendimiento es estelar.
No, Quizás No Valga la Pena, SI… ❌
- Necesitas el Máximo Brillo: Si tu sala es extremadamente luminosa o quieres que las luces especulares del HDR „cieguen” tus ojos, los OLED más nuevos o los QD-OLED ofrecen un pico de brillo superior.
- Estás Obsesionado con lo Último en Procesamiento: Si quieres la última iteración de escalado y procesamiento de imagen con IA, las generaciones más recientes de LG (y otros fabricantes) han avanzado mucho.
- Te Preocupa la Vida Útil de un Usado: Comprar un OLED de segunda mano siempre conlleva un riesgo inherente de burn-in si el anterior dueño no fue cuidadoso. Es fundamental inspeccionar el panel a fondo.
- Quieres la Garantía y Soporte de un Producto Nuevo: No hay vuelta de hoja, un producto nuevo ofrece tranquilidad.
- Tu presupuesto te permite un OLED de última generación: Si puedes estirar tu presupuesto para un LG C3 o incluso un C2, obtendrás mejoras significativas en brillo, procesamiento y longevidad de soporte.
Conclusión: Un Clásico que Todavía tiene Mucho que Ofrecer
El LG OLED55B9PLA es, sin duda, un televisor que marcó un hito. Su calidad de imagen OLED sigue siendo excepcional, y su sorprendente inclusión de HDMI 2.1 lo mantiene relevante, especialmente para los gamers. En 2024, no lo considerarías como tu primera opción si tu presupuesto es ilimitado, pero si buscas una experiencia OLED premium a un precio de ganga en el mercado de segunda mano, y estás dispuesto a asumir los riesgos inherentes a una compra de este tipo (principalmente el estado del panel), el B9 puede ser una joya oculta.
Para aquellos que valoran el contraste perfecto y las capacidades de juego avanzadas por encima del brillo máximo o las últimas florituras de software, el LG B9 podría ser, todavía hoy, una inversión sorprendentemente gratificante. Se trata de encontrar el equilibrio perfecto entre rendimiento, precio y expectativas personales. ¿Sigue valiendo la pena? Para muchos, absolutamente sí. 😊