¡Hola a todos los entusiastas de la tecnología y a los que simplemente buscan la mejor opción para su ordenador! 💡 Si estás aquí, es probable que te encuentres en esa encrucijada tan común: ¿invierto un poco más en lo último o me quedo con un clásico probado y de gran rendimiento? Hoy ponemos bajo la lupa a dos auténticos titanes del almacenamiento SSD SATA: el Samsung EVO 850 y su evolución, el Samsung EVO 860. La pregunta clave que nos trae aquí es simple, pero crucial para tu bolsillo y la agilidad de tu sistema: ¿vale la pena desembolsar esos 20€ adicionales por el modelo más reciente? Vamos a desgranarlo.
Desde que los SSD (Unidades de Estado Sólido) irrumpieron en el mercado, han transformado radicalmente la experiencia de uso de cualquier ordenador. Atrás quedaron los interminables tiempos de arranque y carga de aplicaciones. Samsung, en particular, se ha erigido como un referente indiscutible en este sector, y sus series EVO son sinónimo de equilibrio entre rendimiento, fiabilidad y precio. El 850 EVO fue un caballo de batalla para millones de usuarios, y el 860 EVO llegó prometiendo mejoras. Pero, ¿son esas mejoras lo suficientemente palpables como para justificar una pequeña inversión extra? ¡Acompáñanos en este detallado análisis!
Un Vistazo al Pasado: El Legendario Samsung 850 EVO 🕰️
Cuando el Samsung 850 EVO llegó al mercado, marcó un antes y un después. No era solo un SSD más; fue uno de los primeros en popularizar la tecnología V-NAND 3D de Samsung, que apilaba celdas verticalmente. Esto permitía mayor densidad de almacenamiento, mejor eficiencia y, lo más importante, una durabilidad superior en comparación con las NAND planas de la época. Utilizaba memoria TLC (Triple-Level Cell), pero gracias a su innovadora controladora MEX y la tecnología TurboWrite (que usaba una porción de la NAND como caché SLC), lograba mantener unas velocidades impresionantes para las tareas cotidianas y mucho más.
Su fama se cimentó en una combinación perfecta: un rendimiento excepcional en el día a día, una fiabilidad a prueba de bombas y un precio que se volvía cada vez más accesible. Millones de usuarios experimentaron un renacer de sus antiguos equipos con este componente. No solo era rápido al arrancar Windows o cargar programas, sino que también ofrecía una estabilidad envidiable. Para muchos, el 850 EVO no solo era una mejora, sino una puerta de entrada a una nueva era de velocidad en sus PCs. Su durabilidad, medida en Terabytes Escritos (TBW), era más que suficiente para el usuario medio, y su garantía de cinco años infundía una gran tranquilidad.
El Presente y el Futuro: Damos la Bienvenida al Samsung 860 EVO 🆕
Con la vara tan alta que dejó el 850 EVO, su sucesor, el Samsung 860 EVO, tenía un desafío importante. No se trataba de reinventar la rueda, sino de perfeccionarla. Lanzado en 2018, el 860 EVO llegó con una clara ambición: mejorar lo ya excelente en aspectos clave como la durabilidad, la eficiencia y el rendimiento sostenido. Samsung logró esto a través de varias innovaciones significativas, manteniendo el formato SATA de 2.5 pulgadas, compatible con la gran mayoría de los equipos existentes.
La unidad 860 EVO incorpora la más avanzada V-NAND 3D de 64 capas de Samsung, lo que supone un salto generacional respecto a las 32 capas de su predecesor. Además, estrenó una nueva controladora MJX, diseñada para manejar de forma más eficiente este nuevo tipo de memoria y las cargas de trabajo más exigentes. Aunque sigue utilizando memoria TLC, la mejora en la arquitectura de la NAND y la controladora buscan mitigar cualquier posible desventaja inherente a este tipo de celdas, ofreciendo una experiencia aún más robusta y una vida útil prolongada. En esencia, Samsung buscaba no solo mantener la corona, sino fortificarla ante la creciente competencia.
Comparativa Técnica Detallada: ¿Qué Ha Cambiado Realmente? ⚙️
Para entender si los 20€ de diferencia están justificados, necesitamos ir más allá de los números superficiales y adentrarnos en las especificaciones técnicas. Aquí es donde se revelan las verdaderas mejoras:
- Controladora:
- 850 EVO: Utilizaba la controladora MEX (en algunos modelos más recientes, MGX). Esta controladora fue muy avanzada para su tiempo, ofreciendo un excelente equilibrio.
- 860 EVO: Introduce la controladora MJX, un diseño más moderno y optimizado. Esta nueva controladora mejora la eficiencia en la gestión de la memoria, ofrece una mejor corrección de errores (ECC) y está diseñada para sacar el máximo partido a la V-NAND de 64 capas. En entornos de trabajo intensivo, esto se traduce en una mayor estabilidad y consistencia.
- Tecnología NAND:
- 850 EVO: V-NAND 3D de 32 capas (TLC). Una innovación clave en su momento que permitió superar muchas de las limitaciones de las NAND planas.
- 860 EVO: V-NAND 3D de 64 capas (TLC). El doble de capas no solo significa mayor densidad (permitiendo mayores capacidades en el mismo espacio), sino también una mayor eficiencia energética y una durabilidad mejorada por celda. Esto es fundamental para entender el salto en la vida útil.
- Velocidades de Lectura/Escritura Secuenciales:
- 850 EVO: Típicamente, hasta 540 MB/s de lectura y 520 MB/s de escritura.
- 860 EVO: Ligeramente superiores, hasta 550 MB/s de lectura y 520 MB/s de escritura.
A simple vista, las velocidades secuenciales no muestran un salto gigantesco. Esto se debe a que el estándar SATA 6Gbps ya está cerca de su límite teórico (unos 600 MB/s). Sin embargo, las mejoras se notan más en la estabilidad de estas velocidades bajo cargas sostenidas y en el manejo de archivos de gran tamaño.
- Velocidades Aleatorias (IOPS):
- 850 EVO: Hasta 98,000 IOPS de lectura y 90,000 IOPS de escritura.
- 860 EVO: Hasta 98,000 IOPS de lectura y 90,000 IOPS de escritura.
Aquí, las especificaciones son idénticas en teoría. Las IOPS (Operaciones de Entrada/Salida por Segundo) son cruciales para la agilidad del sistema operativo y la carga de muchas aplicaciones pequeñas. En este aspecto, ambos modelos ya eran excelentes y el 860 no buscaba una mejora drástica, sino más bien mantener la consistencia bajo diferentes escenarios.
- Durabilidad (TBW – Terabytes Written):
- 850 EVO: 75 TBW para el modelo de 250GB, 150 TBW para el de 500GB y 1TB, y 300 TBW para el de 2TB y 4TB.
- 860 EVO: 150 TBW para el modelo de 250GB, 300 TBW para el de 500GB, 600 TBW para el de 1TB, 1200 TBW para el de 2TB y 2400 TBW para el de 4TB.
¡Este es uno de los puntos más importantes! El 860 EVO duplica o incluso triplica la resistencia del 850 EVO en casi todas las capacidades. Esto significa que puedes escribir muchísima más información en el disco antes de que alcance su límite de vida útil garantizada. Para el usuario promedio, esto ya era alto en el 850, pero el 860 ofrece una tranquilidad inmensa, especialmente para usuarios más exigentes o para equipos que se usan intensivamente.
- Memoria Caché (DRAM): Ambos utilizan memoria caché LPDDR3 (850) o LPDDR4 (860), generalmente 512MB para modelos de hasta 1TB y 1GB o más para capacidades superiores. El 860 puede tener cachés más rápidas, lo que contribuye a su mejor gestión general.
- Consumo energético: La V-NAND de 64 capas y la controladora MJX son más eficientes. Aunque la diferencia es marginal para el usuario final, se traduce en un menor calor generado y una ligera mejora en la duración de la batería para portátiles.
- Garantía: Ambos modelos ofrecen una sólida garantía de 5 años, lo que habla de la confianza de Samsung en la fiabilidad de sus productos.
Rendimiento en el Mundo Real: ¿Se Notan Esos 20€? 💨
Aquí es donde la teoría se encuentra con la práctica. Para la gran mayoría de los usuarios, las tareas cotidianas como arrancar el sistema operativo, abrir el navegador, cargar documentos o incluso jugar a videojuegos, el salto de rendimiento percibido entre el 850 EVO y el 860 EVO será prácticamente imperceptible. Ambos son increíblemente rápidos, y la limitación principal suele ser la interfaz SATA 6Gbps, no las unidades en sí.
„En el uso diario, la diferencia entre un Samsung 850 EVO y un 860 EVO es tan sutil que la mayoría de los usuarios difícilmente la notarán sin un cronómetro en mano. La verdadera ventaja del modelo más nuevo reside en su robustez y longevidad, más que en una velocidad explosiva que el estándar SATA ya no puede ofrecer.”
Donde el 860 EVO puede mostrar una ventaja más clara es en escenarios de trabajo más intensivos: la transferencia constante de grandes archivos (edición de vídeo, por ejemplo), bases de datos o en entornos multitarea muy demandantes. Su controladora más eficiente y la NAND de 64 capas le permiten mantener un rendimiento más estable y sostenido durante periodos más largos, minimizando las caídas de velocidad que a veces pueden ocurrir en unidades TLC cuando la caché SLC se agota y la escritura directa en TLC se ralentiza. Sin embargo, para la mayoría, estos escenarios son excepcionales.
Durabilidad y Fiabilidad: Un Punto Clave para la Inversión 🛡️
Si hay una razón de peso para considerar el Samsung 860 EVO por encima de su predecesor, esa es la durabilidad. El incremento en los TBW no es un mero número; es una promesa de vida útil prolongada. Piensa que un usuario promedio escribe entre 10 y 20 GB de datos al día. Incluso el 850 EVO de 250GB, con sus 75 TBW, tardaría más de 10 años en alcanzar ese límite.
Pero para aquellos que usan su ordenador intensivamente, para creadores de contenido que editan vídeo 4K, fotógrafos que manejan archivos RAW gigantescos, o simplemente para aquellos que desean la máxima tranquilidad, el doble o triple de TBW del 860 EVO es un argumento muy convincente. Si tu objetivo es que tu SSD te acompañe durante muchos años, o si lo vas a someter a un uso intensivo, esta mejora en la durabilidad es una inversión inteligente. Te proporciona un margen de seguridad mucho mayor y asegura que el componente pueda afrontar futuras cargas de trabajo sin problemas de desgaste.
El Factor Precio: ¿Son Justificados los 20€ Extra? 💰
Llegamos al quid de la cuestión: esos 20€ de diferencia. En el momento del lanzamiento, la brecha de precio era a menudo mayor, pero ahora se ha estrechado considerablemente. Pongamos un ejemplo: si el 850 EVO de 500GB se encuentra por 60€ y el 860 EVO de la misma capacidad por 80€, estamos hablando de un 33% adicional en el precio.
¿Qué obtienes por esos 20€ adicionales?
- Una controladora MJX más moderna y eficiente.
- La última generación de V-NAND 3D (64 capas).
- Una durabilidad significativamente superior (TBW).
- Una ligera mejora en la eficiencia energética y rendimiento sostenido bajo carga.
Si la diferencia es solo de 20€, y la capacidad que buscas es de 500GB o más, la balanza empieza a inclinarse fuertemente hacia el 860 EVO. La inversión adicional es relativamente pequeña en el contexto del coste total de un ordenador o una mejora, y los beneficios en durabilidad y tranquilidad son tangibles. Si bien no experimentarás un „doble de velocidad” por esos 20€, sí obtendrás un „doble de durabilidad” en muchos casos, que es un factor muy valioso a largo plazo.
Si, por el contrario, encuentras un 850 EVO a un precio excepcionalmente bajo (por ejemplo, 40€ por 500GB), la propuesta de valor del modelo antiguo se vuelve muy atractiva, especialmente si tu presupuesto es ajustado o si solo necesitas un SSD para un equipo secundario o un uso muy básico.
¿Quién Debería Comprar Cada Modelo?
Para cerrar este análisis, vamos a perfilar a los usuarios ideales para cada una de estas excelentes unidades:
Samsung 850 EVO: 🧑💻
- Usuarios con presupuesto muy ajustado: Si cada euro cuenta y encuentras una oferta irresistible, el 850 EVO sigue siendo una compra fantástica que transformará cualquier equipo con disco duro mecánico.
- Actualización de equipos secundarios: Para un PC que no es tu máquina principal, un NAS o un equipo de uso ligero, el 850 EVO ofrece un rendimiento más que suficiente.
- Quienes ya tienen uno y no ven necesidad de más: Si ya posees un 850 EVO, no hay una razón de peso para actualizar al 860 EVO por motivos de rendimiento puro. La diferencia es mínima.
Samsung 860 EVO: 🚀
- Usuarios que buscan la máxima durabilidad y fiabilidad: Si eres un profesional que trabaja con grandes volúmenes de datos, un creador de contenido o simplemente alguien que quiere la máxima longevidad para su inversión, el 860 EVO es la elección obvia.
- Gamers exigentes y entusiastas: Aunque el rendimiento en juegos no será radicalmente distinto, la mayor estabilidad y durabilidad ofrecen paz mental para tu plataforma principal.
- Inversión a largo plazo: Para tu PC principal, donde quieres asegurarte de tener un componente robusto para los próximos 5-10 años, los 20€ extra están bien justificados.
- Aquellos que compran nuevas capacidades: Si estás comprando un SSD SATA desde cero o ampliando la capacidad, y la diferencia de precio es mínima, el 860 EVO es la opción más moderna y completa.
Conclusión: Nuestra Opinión Final 🤔
La pregunta de si vale la pena pagar 20€ más por el Samsung 860 EVO no tiene una respuesta única, pero nuestra opinión, basada en los datos, es clara: sí, en la gran mayoría de los casos, merece la pena. Aunque las ganancias en velocidad pura no sean revolucionarias debido a las limitaciones de la interfaz SATA, las mejoras en la durabilidad (TBW), la eficiencia de la controladora MJX y la modernidad de la V-NAND de 64 capas son factores muy valiosos.
Esos 20€ adicionales se traducen en una unidad más robusta, con una vida útil significativamente más larga y una mayor tranquilidad para el usuario. Es una pequeña inversión extra que te asegura un componente más preparado para el futuro y para cargas de trabajo más exigentes. Si tu presupuesto es muy ajustado o encuentras una oferta excepcional del 850 EVO, este sigue siendo un excelente SSD. Pero si puedes estirar un poco más el presupuesto, el 860 EVO es la elección más lógica y sensata para tu equipo principal. ¡Tu PC y tu tranquilidad te lo agradecerán!